La última película de Ridley Scott ha despertado sensaciones encontradas en unos, satisfacción en otros. La nueva versión del Robin Hood se presenta como una película histórica que ahonda en las raíces del personaje antes de convertirse en el que todos conocemos, interpretado esta vez por Russell Crowe, al que ya viéramos en otro film históricos del director como Gladiator. Robin Hood aún el mismo espíritu que caracteriza al personaje, pero visto desde una óptica algo distinta, visto desde la perspectiva histórica de Ridley Scott, el que ya nos brindara una prometedora, aunque desaprovechada cinta ambientada en las Cruzadas, El Reino de los Cielos. La nueva versión del mito de la calzas y arco de puntería certera es una revisión del personaje actualizada, un prólogo a sus aventuras, y con una estética de lo mejor del cine histórico del director.
Personalmente, he disfrutado más con esta película que con otras que he visto últimamente. Las dos horas y algo más que dura se pasan volando, y me ha resultado tan entretenida como las mejores cintas de aventuras. Ya desde el principio se nos muestra una secuencia bien rodada del asalto a un castillo, con buen despliegue de medios y efectos especiales que serán la baza que Ridley Scott emplea para mostrarnos una Inglaterra en lucha con Francia, la época de Ricardo Corazón de León en la que la Tercera Cruzada a Tierra Santa es agua pasada que se recuerda con una mezcolanza entre cansancio y pesadumbre. Un rey entrado en años que admira y respeta a sus hombres, entre los que se encuentra Robin Longstride, quién posteriormente pasará a llamarse Robin Hood por una serie de circunstancias que descubriremos si vemos la película.
A diferencia de su predecesora en terreno histórico, esta nueva cinta del director se me antoja con un mayor optimismo (quizá por aquello de los Merry Men), debido quizá a la personalidad de todos y cada uno de los personajes que intervienen en la historia, no lo sé. Pero de lo que sí estoy seguro es de que es una película mucho más alegre de lo que fueron Gladiator o El Reino de los Cielos, en los que el humor no abundaba precisamente. Pero aparte de eso, la interpretación que lleva a cabo Russell Crowe del personaje me parece plausible, dando a un Robin Longstride la personalidad de un hombre de honor, valiente, inteligente, astuto y reservado, cuyo sentido de la camaradería y honor es propio de los ingleses más patrióticos para con su tierra, sobre todo cuando se ven amenazados por los belicosos franceses. De ahí que se vea envuelto en una trama de falsas identidades por cumplir el último deseo de un moribundo (el verdadero Robin Loxley), que consiste en devolver su espada al legítimo dueño, su padre. Sí, la cinta tiene dramatismo y escenas de corte violento e injusticia, como cuando los soldados abusan de las pobres gentes de una Nottingham llena de caminos embarradas, granjas y casas rústicas de madera por la que deambulan cerdos y pollos. Pero no por eso deja de haber cierto romanticismo, pese a lo que pudiera parecer por la Edad Media que se nos muestra (muy distinta a la de otras versiones del personaje, allá van Kevin Costner o Disney), encarnado por supuesto por un Robin que cada vez va a más, y por los ideales del ejército inglés que se ve abocado una y otra vez a la guerra por culpa de sus gobernantes.
En cuanto al resto del reparto, cumplen de sobras un Mark Strong perfecto en el papel de Godfrey (que hace la función de villano más activo en la película), una bella Cate Blanchett muy convincente en su papel de Marion Loxley (una mujer altiva, luchadora y con recursos), William Hurt, Max von Sydow, Mark Addy, Eileen Atkins como Eleanor de Aquitania... Y un Oscar Isaac (Orestes en Ágora) que cumple perfectamente en el papel del Príncipe Juan. Todos ellos están más que correctos en sus respectivas interpretaciones. De estos y de otros personajes que acompañan a Robin (también está por ahí Little John) son los que servirán para forjar la leyenda de siempre.
Mi impresión general es la de una película decente, un fresco histórico bien planteado (pero sin profundizar mucho en él), las escenas de acción y batallas a las que nos tiene acostumbrados Ridley Scott (una de ellas parece un desembarco de Normandía medieval), personajes interesantes, más humor de lo habitual (de ahí el optimismo que comentaba antes), y una interesante puesta en escena que hacen de Robin Hood una correcta revisión del clásico, diferente a como pueda ser la versión de Curtiz con un Errol Flynn de calzas verdes. Los fans de Ridley Scott no deberían perdérsela por nada del mundo, pienso que les satisfará en demasía. A los no entusiastas, pero que busquen una buena película histórica, también podrían salir satisfechos. Por otra parte, los conoceros más acérrimos de Robin Hood no deberían mirar con lupa ni mucho menos cada uno de los detalles que construyen la película pues, como digo, se trata de un inicio de personaje que aún no es el personaje de la leyenda. Sí, aparecen muchos indicios que vendrán después aunque casi todo esté ahí, hasta el Sheriff de Nottingham, un agente de la (supuesta) ley venido a menos. Como último apunte, la escena final la encontré sencillamente fuera de lugar en cuanto al resto de la película.
Quisiera recalcar una última cosa antes de finalizar esta crítica. No estoy para nada de acuerdo con el trato que se le ha dado a la película en relación a su relativo parecido con Gladiator. Pienso que no tiene absolutamente nada que ver una con la otra, ni en trasfondo, ni en personajes, ni en desarrollo, ni en nada de nada. El único parecido que le veo es la elección de Russell Crowe (¿y si hubiera sido otro actor?) para el papel de Robin, y su director. Por lo demás, cualquier tipo de comparación negativa al respecto (que son mayoría) me resulta totalmente gratuita e injustificada. Dos películas totalmente diferentes.
11 comentarios
Mañana, si los dioses quieren, veré esta o la de Prince of Persia, aún no es nada seguro, según cómo nos encontremos de ánimo cuando lleguemos al cine. Tengo mucha curiosidad por la película desde que vi el trailer y supe que estaban haciéndola. Me alegra ver una reseña positiva :) ¡Nos leemos!
Siempre me ha gustado el cine de Ridley Scott.... las habrá mejores y peores pero siempre he disfrutado con ellas.Todavía no he podido ver la de Robin Hood pero estoy deseando ir a verla.
Lo de la comparación con Gladiator será más por el personaje que por otra cosa, también El Reino de los cielos es histórica y no la comparan(que pena de película que prometía y quitando algunas escenas de acción memorable el resto es bastante mejorable)
Salu2.
Irewen:
Ya sé que sin distintas, pero me ha gustado mil veces más la de "Robin Hood" que la de "Prince of Persia". Esta última la vimos anoche, y aunque a Cyram sí le gustó, a mi no me hizo mucho tilín, me esperaba mucho más. :(
Pardi:
Pues sí, la comparan con el personaje, pero también he visto por ahí opiniones del propio esquema de la película, sobre venganza, las batallas, los villanos... Ni idea, pienso que no tiene absolutamente nada que ver. Si te gustó "El Reino de los Cielos" (yo también creo que le falta mucho) esta posiblemente te guste más.
Yo también me alegro de ver una opinión bastante positiva sobre la película. Tengo las entradas ahí esperando sacar un rato, pero ni el fin de semana pasado pude ir, ni podré tampoco este... :(
Pues es un alivio que no se parezca a Gladiator porque, en contra de la crítica general sobre el peplum de Scott, a mi no me gustó especialmente (aunque tendría que volver a verla y darle una nueva oportunidad, la verdad). Por contra, la que sí me gustó hasta donde recuerdo, fue El Reino de los Cielos...
¡Ah, ya nos contarás más extensamente sobre Prince of Persia también!
".Como último apunte, la escena final la encontré sencillamente fuera de lugar en cuanto al resto de la película." Estoy total y absolutamente de acuerdo. Para mí esa escena me tiro por completo la película y me dejo muy mal sabor de boca cuando salí (se que soy un poco exagerada, pero meter eso al final me parece que la cagaron xD), luego valorando el conjunto pues es cierto que no está mal, y el punto de vista que le dieron es muy original.
Para mi la comparación de Russell Crowe, que no de la película, con Gladiator es inevitable. La caracterización del personaje debería haberse alejado de la anterior, no sé ponerle melenas o algo porque el parecido es demasiado. Quitando eso, tengo ganas de verla, me encantan las batallitas de este director aunque El Reino de los Cielos no me convenció.
Yo soy de las que tampoco le gustó "El Reino de los Cielos". Qué película más mala. Además, creo recordar que también había algunos deslizes históricos.
Al final cayó Prince... y no me ha convencido para nada, me esperaba mucho mucho mucho más, a ver cuándo puedo arrastrar al cine o lo que sea a alguien para ver a Robin Hood porque cada vez tengo más y más ganas de verla. ¡Un saludo!
Sally
Pues ya somos dos a los que esa escena le pareció que sobraba totalmente.
Elwen
Pero aún así yo creo que la comparación entre una u otra, como he visto por ahí, es muy desafortunada porque a pesar de que el personaje parece el mismo, no tiene ni la misma presencia, ni actitudes ni nada. Y el entorno hace mucho.
Beldz
Jo, tan mala mala no es. :D Es cierto que Orlando Bloom podría estar mejor, y que la historia daría mucho más de sí, pero al menos resulta entretenida como cinta a medio camino entre casi aventuras e historia. xD
Irewen
Pues vaya pena de elección. xDD Ya hablaremos algo sobre esa peli, a mi tampoco me convenció. Prefiero de lejos "Robin Hood". A ver consigues verla.
Realmente es un placer leer tus críticas, siempre estan fundamentadas, llenas de acierto y libertad, lo que te hace aún más creible. Nos recreas al personaje sin darnos indicios de cómo será en reaidad, salvo el personaje que encarna, por lo no decrece el interés sino que lo vas aumentando, dan ganas de pedir dinerillo para acercarse a verla. Muchísimas gracias por tu dedicación y prontitud en tratar los temas. Gracias por estar ahí. Amanda Holsland
Pues muchas gracias por tus palabras, Yobana, y gracias por leer además. ;)
Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.