"Thor", de Kenneth Branagh (por Loren)

Reseña de la película de Kenneth Brannagh, que adapta las aventuras del Dios del Trueno de la Marvel a la gran pantalla.

La última adaptación de un cómic Marvel a la gran pantalla viene precedido por un nombre tan relevante en el mundo del cine como es el del señor Kenneth Branagh. El poderoso Thor ve cumplido al fin una adaptación cinematográfica a la altura de las circunstancias modernas, que se suma a la ya numerosa lista de otras tantas adaptaciones de cómics de superhéroes que han dado un boom bastante considerable en el mundo del cine de los últimos años, véanse casos como las dos entregas de Hulk, las de los X-Men (con la inminente X-Men: First Class) o Iron Man. Haciendo un poco de historia, Thor fue creado por Jack Kirby y Stan Lee (voilá, tenemos cameo de la celebridad en la película) durante los años sesenta, con la primera aparición en Journey Into Mystery en forma de relatos sueltos, cuya inspiración directa fue el mismo dios de la mitología nórdica, ambientación que ha sido plasmada, como no podía ser de otra manera, en la cinta que ahora nos ocupa. Es la primera vez que podemos asomarnos a un universo mayor de lo que hasta ahora había aparecido en las películas Marvel, porque en las de "X-Men" se ha venido ignorando todo el componente space opera que suele caracterizar algunas colecciones famosas como La Saga de Fénix Oscura, Las Guerras Asgardianas o los Nuevos X-Men, por citar unos ejemplos. Esos detalles hacen que el universo Marvel cobre un mayor aire de unificación en las películas, y a eso le unimos algunas referencias menores a otros personajes.

Con un universo tan amplio el que habita el portador de Mjolnir, no podríamos esperar que una cinta de poco menos de dos horas duración captara en su plenitud cada aspecto, cada recoveco del mismo, pues el cosmos que forman los mundos que rodean a Asgard, la ciudad de los dioses, es terriblemente extenso. Únicamente aparecerán en la cinta el reino de los gigantes, Jotunheim, y la Tierra, donde Thor se pasará buena parte del metraje de la película gracias a su arrogancia y al destierro que le impone su padre Odín para que allí conozca lo que es la humildad y el estar despojado de todo poder. Mjolnir se incrustará en la tierra, siendo imposible que este sea extraído por ningún medio posible (los diversos intentos que tienen lugar me recordaron a una vesión del mito artúrico), lo que además llamará la atención del gobierno por un artefacto misterioso que de pronto aterriza en el planeta, acontecimiento ha podido verse en Civil War: Preludio (y al final de Iron Man 2, tras los créditos).


Las sensaciones que tengo para con la película son encontradas. Por un lado, me ha parecido un intento bastante loable, y respetable, de llevar a una pantalla de cine las aventuras de este dios de la mitología Marvel, pero por otro pienso que la película podría haber sido mucho más de lo que al final ha sido. Una historia sencilla que de no ser por ciertos personajes hubiera resultado demasiado predecible y carente de chispa e imaginación, pues tiran de lo más conocido (Jotunheim, el reino de los gigantes) para llevar a cabo la trama de supuestas traiciones, amenazas varias al reino de Asgard y redención de Thor. Esos personajes son por supuesto la presencia de un Anthony Hopkins caracterizado como el tuerto Odín, y un magistral Tom Hiddleston como Loki (que representa muy bien papel como Príncipe de las Mentiras), sin duda los puntos fuertes de la película junto a Chris Hemsworth, que interpreta a un convincente Thor. El resto del reparto, salvo Idris Elba como Heimdall (guardián del Bifrost), queda eclipsado por este trío de personajes, con unos discretos Stellan Skarsgard, Rene Russo y Natalie Portman (quien últimamente está saliendo en muchas películas) en el papel de simples mortales. ¡Los protagonistas son los dioses!

Los efectos especiales son sin lugar a dudas otro de los puntos fuertes de la cinta, con una Asgard de la que ciertamente sólo se nos muestra la superficie, viendo el interior del palacio de Odín, el puente de arco iris Bifrost (que enlaza con los demás mundos), y poco más. Efectos especiales adecuados a los tiempos que corren, con unos gigantes de hielo que a mi personalmente son lo que más me ha llamado la atención de esta adaptación, en especial cuando se encuentran en su elemento, en Jotunheim. Por lo demás, efectos sonoros correctos, una banda sonora de Patrick Doyle (Harry Potter y el Cáliz de Fuego) que pasa algo desapercibida en favor de las imágenes, y unas escenas de lucha que no son nada del otro mundo (nunca mejor dicho) a mi parecer, las típicas secuencias "flash" que producen algo de mareo y nada se ve, tan sólo te lo imaginas como espectador por los borrones de movimiento y el contundente sonido, pero que afortunadamente son pocas, y la más importante está bien realizada, cargada de épica y heroismo.

Otra cosa que quiero comentar en la reseña es el humor que impregna todo el conjunto, relajando quizá demasiado ese tono de decadencia, melancolía y pérdida (nada nuevo en la mitología nórdica, vamos) que el director habrá pensado en darle al asunto. No nos engañemos, el aura de epicidad y enfrentamiento familiar cobra su buena importancia cuando estamos en Asgard, pero cuando regresamos a la Tierra con Thor es un tono algo más distendido, el choque que produce en la vida moderna la intrusión de un guerrero vikingo que tira las jarras de bebida al suelo y entra a una tienda de mascotas pidiendo un caballo. Quizá ese humor se agradece, pero el tono épico y de lucha fraternal se esfuma ligeramente para dar un sabor distinto a esta cinta de superhéroes.


Se trata en definitiva de una buena película, que sin ser una obra maestra ha conseguido que una vez más, y por ser una adaptación Marvel, un buen montón de gente acuda al cine para ver las cachas de Hemsworth como Thor (en el caso de las féminas), o en el caso de los comiqueros, por ver adaptado a la gran pantalla un hito del cómic. Sea cual sea la razón, este Thor de Kenneth Branagh podría haber sido una película infinitamente mejor, considero que hay situaciones un poco mal aprovechadas, otras posibilidades que hubieran estado muy bien no se contemplan, y en general es un producto algo inferior en mi baremo de películas de cómics Marvel (antes elegiría a X-Men 2 como adaptación predilecta), donde el director ha optado por una mayor comercialidad, obvio tratándose de un producto palomitero donde prima el músculo y el martillo. Pero que aún así es una película de buen ver y que deja un buen regusto tras su visionado. En caso de funcionar de seguro veremos un Thor 2, de la que esta primera parte puede considerarse perfectamente una introducción. Para los nuevos que quieran adentrarse en los cómics de Thor, recomiendo la lectura de Las Edades del Trueno, que funciona muy bien como introducción al personaje.

Quedáos a los créditos finales, porque después de ellos tenemos una escena bonus, como ocurre en casi todas las películas de superhéroes. La buena noticia es que veremos a Thor en Los Vengadores.

***

Ventajas:
-Una correcta adaptación del cómic.
-La caracterización e interpretación del actor que hace de Loki.
-La plasmación de Asgard y la tecnología que la une con el resto de mundos de la cosmología.

-La parte técnica es notable.

Desventajas:
-Tono épico de la cinta algo distendido en pos del humor.
-Una trama facilona y algo predecible.
-Que no te guste el Dios del Trueno, en cuyo caso poco le puedes hacer.

por Loren Sparrow mayo 16, 2011