Reseña: «Thor: Dioses Errantes», de Joe Michael Straczynski y Olivier Coipel

Título original: Thor vol. 3, #1-6 USA.
Guión: Joe Michael Straczynski.
Dibujo: Olivier Coipel.
Color: Laura Martin, Paul Mounts.
Edición: 160 págs. Panini Cómics, col. "Marvel Deluxe", julio 2012.
Precio: 16 €.
Traducción: Gonzalo Quesada.
Temática: Superhéroes, cómic.
Correlación: Primera entrega de la etapa de Thor a manos de J. Michael Straczynski y Olivier Coipel.

Debo de ser sincera cuando admito ante todo aquel que vaya a leer esta reseña, que no soy una gran lectora de superhéroes. A lo largo de toda mi vida he leído muchos cómics, pero siempre me he caracterizado por un gusto más concreto hacia el cómic francés, el español como los tebeos de Mortadelo y Filemón y en contadas ocasiones a alguna que otra serie como la maravillosa Fábulas de Bill Willingham.

Sin embargo, esto no quiere decir que no disfrute como una loca con los cómics que de forma esporádica tengo el placer de leer en los que personajes como Los Vengadores, Spider-Man o los X-Men me ofrecen una tarde muy agradable completamente alejada de todos los problemas que, hoy por hoy, bien sabemos todos que son muchos. La última cosa que hice, donde me reencontré con mis ganas de leer superhéroes, fue con las películas de Thor, Iron Man, Los Vengadores y finalmente Spider-Man. Por suerte para esta última, Disney ha cogido las riendas de la Marvel y no tendremos que ver nunca más escenas tan vergonzosas como las aparecidas en la tercera entrega de mi odiado director Sam Raimi. Es por lo tanto un placer sumergirse en historias realmente interesantes como la que he tenido el placer de descubrir en la entrega de Marvel Deluxe de mano de Panini Cómics titulada Thor: Dioses Errantes.

Si os digo que los que se encargan de llevar a cabo esta nueva aventura de Thor son el tándem de Straczynski y Coipel, estoy segura al cien por cien de que muchos de vosotros iréis corriendo a vuestra tienda de cómics habitual y os haréis con este tomo, antes incluso de acabar de leer mi frase. Como no podía ser de otra forma, el argumento que se nos presenta en esta vivencia de Thor está englobada en su última muerte. Como bien sabréis algunos de sus seguidores y los que estéis más al tanto de la mitología nórdica, todos los dioses de ese panteón están condenados a recorrer un ciclo tanto doloroso como tortuoso. Digamos que se podría llamar "un día de la marmota de proporciones divinas", en el que los dioses tienen que pasar por todo un proceso de nacimiento, crecimiento y muerte para después volver a nacer y volver a enfrentarse a ese fin de todo lo conocido llamado Ragnarok.

En esta ocasión, tendremos que conocer algún que otro acontecimiento anterior para poder paladear completamente los acontecimientos narrados en este cómic de 160 páginas, como qué es lo que provocó el útlimo Ragnarok, porqué Odín no ha vuelto a despertar y dónde se encuentra nuestro protagonista en el momento de despertar. El cómic de por sí, a parte de por un guión de lujo y unos personajes que parecen salirse de las páginas por la magia invertidos en ellos, es si cabe más importante porque desde la última muerte de estos dioses nórdicos, Marvel no había vuelto a publicar ningún tipo de aventura sobre Thor ni todos los compañeros que desde siempre le han rodeado. Como bien explica Raimon Fonseca en la introducción, el mundo de los superhéroes parecía vacío sin tener a una figura como Thor entre sus filas. Es más, de todos los protagonistas de los cómics y demás, junto con Namor –quien hunde la mitad de su ADN en las raíces de la hundida Atlantis–, Thor es el único dios como tal que decide luchar por el honor y el bien.

A lo largo de estas páginas podremos ver cómo intenta luchar contra esa sensación de pérdida cuando se da cuenta de que Asgard como tal ya no existe y que debe de empezar desde cero una vez más, pero en esta ocasión con la posibilidad de no repetir errores pasados. Se le ofrece la alternativa de no entrar a formar parte de esa rueda sin fin que provoca una y mil veces esa muerte y renacimiento. No quiero deciros más, ya que considero que os encantará leerlo por vosotros mismos. Para mi gusto ha sido uno de los cómics más divertidos, impresionantes y fascinantes de los que he podido leer en mucho tiempo. Sin embargo tengo un sentimiento algo agridulce y es que en lugar de ser independiente, la historia continúa en Días de Trueno. Sea lo que sea, os lo recomiendo, ya que veremos lugares como Nueva Orleans tras el desastre de las inundaciones y cómo se culpa Thor por no haber podido impedir que las aguas destruyeran la ciudad, las inmensas llanuras de Arizona en la que cada pueblo está a millas de distancia el uno del otro pero donde siempre hay una mujer mayor tratando de hacer de tu estancia una experiencia lo más acogedora posible y una guerra entre tribus enemigas en el corazón de África utilizando de campo de batalla un campamento de refugiados ¿De veras os lo vais a perder?

por Cyram marzo 05, 2013