Título original: Mr. Bulb.
Guión: Pasqual Ferry.
Dibujo: Pasqual Ferry.
Color: Pasqual Ferry.
Edición: 160 págs, color. Planeta DeAgostini, col. "Babel", abril 2013.
Precio: 15,95 €.
Traducción: Ignacio Bentz.
Temática: Autoayuda, ilustración, cómic.
Correlación: Independiente.
En ocasiones, todos hemos visto referencias en los cómics y en las series de dibujos animados cómo a los personajes les aparece una bombilla iluminada sobre la cabeza cuando tienen una idea. Es un símbolo universal que nos explica cómo nuestro cerebro está progresando en un procesamiento interno hacia la resolución de un problema, sea este de la magnitud que sea. Estoy convencida de que lo conocéis, por lo tanto debo aprovechar ahora que tenéis la imagen fresca en vuestra mente para presentaros un cómic muy especial, que más se podría considerar una novela gráfica, o un conjunto de láminas ilustradas con una leyenda o una moraleja concreta, llamado: Mr. Bulb ¿Sueñas que despiertas, Mr. Bulb?.
"Nos ofrece un mundo de realidades pero siempre tendiendo al optimismo"
Antes de nada me gustaría aclarar algo importante. Este cómic no es algo que se le pueda regalar a los niños. Sí, es cierto que hay ilustraciones que podrían gustarles, pero el significado de cada uno de los dibujos están orientados a un público adulto, con sus problemas, sus sensaciones, sus sentimientos y sus ilusiones. Pese a que haya muchos que puedan huir del concepto "novela gráfica de auto-ayuda", puedo decir que
Mr. Bulb no sólo os va a dejar atados al sillón, sino que encima os hará darle vueltas al coco. No tiene un argumento central en el que podáis basaros para ir conociendo a Mr. Bulb, sino que tendremos una serie de ilustraciones que nos mostrarán distintos pensamientos –al fin y al cabo es una bombilla– de nuestro personaje protagonista. Nos
planteará dudas sobre la mentira, la melancolía, el amor, la ilusión, la esperanza, la tristeza, la ira y otros muchos pequeños fantasmas que todos tenemos alrededor de nuestra mente o nuestra alma.
Un detalle que me ha llamado mucho la atención será la presencia de los llamados "monstruos", los "ectoplasmas" y las "sombras". Estas figuras, unas con pelos, otras traslúcidas y otras meras siluetas, serán los que representen las luchas internas de Mr. Bulb. Normalmente los monstruos representan a sus miedos más ocultos, los ectoplasmas a sus pensamientos y las sombras a todo lo que pueda amenazar la estabilidad emocional de nuestro personaje, ya sea porque tiene que tomar una decisión trascendental o porque no sepa que algo le acecha en la oscuridad.
"Recomendado para todos los públicos que en algún momento de sus vidas se hayan sentido un poco apagados"
Las
dos ilustraciones que a mí particularmente más me han gustado han sido las de "La Caja de Pandora" y otra la de "La Resolución de un Problema". En las dos, Mr. Bulb debe tomar una decisión,
en una tiene que decidir si abre la caja de los truenos, llevado por el monstruo de la desesperación que le está tentando para hacerlo, cuando en realidad no sabe que al abrirla provocará que la verdadera sensación de desesperación aparezca y por lo tanto, no sea capaz de volverla a guardar nunca más en su caja y se vea completamente vencido por ella. Me ha parecido una verdadera paradoja que hace pensar bastante en algunas de las decisiones más difíciles que a veces tenemos que tomar en nuestra vida.
La otra ilustración se basa en cómo resolver un problema inmediato. Mr. Bulb y su amigo (al cual veremos en contadas ocasiones como otro humanoide con cabeza de bombilla) quieren alcanzar una manzana que hay en una rama alta, para ello construyen una torre muy inestable de objetos que, en nuestra realidad, jamás podrían haber conseguido quedarse en pie. Sin embargo Mr. Bulb está apunto de coger la manzana. En la parte inferior reza su cita correspondiente diciendo: "Nunca sabes qué parte de tu plan fallará, Mr. Bulb... ¡Pero seguro que es un gran plan!". Claramente es una forma de animar a la esperanza, a arriesgarse aunque el resultado pueda no ser el deseado.
De forma evidente, el "cómic" nos ofrece un mundo de realidades pero siempre tendiendo al optimismo. Inicialmente, el autor –como él mismo reconoce en una pequeñísima introducción– se va encontrando a sí mismo a medida que va avanzando en la creación de este escrito, como Mr. Bulb. Los colores cambian, se van volviendo más luminosos, más vibrantes, pese a que el autor reconozca que su daltonismo inicialmente le afectó mucho a la hora de volver a dibujar porque no se sentía con fuerzas. Los tonos grises a medida que avanzamos en nuestra lectura van desapareciendo, dando lugar a ilustraciones a modo splash page donde podremos ver un paisaje maravilloso. También podremos ver referencias a muchas cosas de "nuestro mundo actual", como puede ser la famosa imagen de Los Beattles pasando por el paso de peatones, el poster de Chat Noir o referencias a novelas tan importantes como Alicia en el País de las Maravillas con la escena de la merienda con el Sombrerero Loco y El Principito, al que acompaña en una reflexión en su pequeño planeta.
Es cierto, no es un libro para niños, pero sí que considero que está recomendado para "todos los públicos" que en algún momento de sus vidas se hayan sentido un poco apagados o quizás sobrepasados por las circunstancias que su entorno les ha provocado. Se lo aconsejo a todos aquellos que ya están cansados de leer siempre lo mismo. Un cómic, aunque sea tan especial como éste, no tiene porqué tener un argumento muy elaborado para resultar interesante. Incluso si os paráis a pensar, el tema central sois vosotros y por supuesto Mr. Bulb –pero si os digo un secreto, creo que la figura de nuestro hombre-bombilla, ha sido solo una excusa para poder introducir un ser genérico que nos pueda representar un poquito a todos–. Así que creedme, no soy ninguna amante de los libros de autoayuda, pero si todos fuesen como Mr. Bulb sería la fan número uno y no me quedaría más remedio que decir...
... – ¡Brilla, Mr. Bulb, brilla!
– ¡GHA-AAAA-AK!
por Cyram
abril 22, 2013
2 comentarios
Voy a tener que leerlo porque la idea me ha parecido curiosa y además la parte artística es también bastante rara, lo suficiente como para querer leerlo.
Tiene toda la pinta de que se podría hacer con él un corto de animación, ¡seguro que quedaría bien!
Muy buena reseña, por cierto. :P
Estoy convencida de que te resultará interesante y te recordará a libros como El Principito. ^^ Además, hay dibujos que dan ganas de comprarle al autor para poner en grande en el cuarto.
¿Sabes a quien me ha recordado mucho el autor? A Martín Favelis. También hacía dibujos del estilo con su moraleja, pero los suyos creo recordar que eran más abstractos.
Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.