Título original: Thor 600-603 y Giant-Size Finale One-Shot USA.
Guión: Joe Michael Straczynski, Stan Lee.
Dibujo: Olivier Coipel, Marko Djurdjevic, David Aja.
Color: Laura Martin, Paul Mounts, Jelena Kevic Djurdjevic, Christina Strain.
Edición: 164 págs, color. Panini Cómics, col. "Marvel Deluxe", noviembre 2013.
Precio: 16 € (tapa dura).
Traducción: Gonzalo Quesada.
Temática: Superhéroes, fantasía, cómic.
Correlación: Tercer volumen de la etapa de Straczynski a cargo de Thor.
Lo peor que te puede pasar cuando una historia te gusta y esperas con ansia su continuación es que posiblemente hayas creado demasiada expectación en torno a su historia o sus personajes, y mucho más si hablamos de que lo que estás esperando cerrará completamente el ciclo que has estado leyendo. Cuento todo esto porque es precisamente lo que me ha pasado con los cómics de Thor en la colección "Marvel Deluxe", capitaneados por el fantástico J. Michael Strackzyinski. Ya os conté lo que me pareció Dioses errantes, al igual que os comenté cómo se comenzaba a complicar la trama en Días de trueno. En los dos tomos anteriores dejo bien clara cual es mi sensación respecto al giro que se le ha querido dar a la historia de Thor, cómo se nos presenta una forma distinta de tratar el Ragnarok y por supuesto, la relación que tiene nuestro Dios del Trueno con otros personajes del universo Marvel. Por esta razón, cuando me enteré de que este tercer tomo del que os traigo la reseña es el que iba a cerrar completamente el ciclo de Strackzyinski, con la inestimable participación de Djurdjevic y Coipel, pensé que sería un final apoteósico, épico, un final que me dejaría el mismo sabor de boca que los otros cómics. Desgraciadamente, debo decir que no ha sido así para nada. Por razones evidentes debo de avisar de que en esta reseña van a aparecer algunos datos que pueden ser considerados spoilers, tanto de los tomos anteriores como de esta tercera y última entrega, por lo que si la leéis debéis de asumir la responsabilidad de lo que os enteréis. Intentaré no ser muy bruta, pero la reseña necesita cierto combustible que de otra forma me sería imposible utilizar. Dicho esto pues, dejadme que continúe.
Teniendo esto en mente, evidentemente me gustaría saber porqué Loki de repente decide dar el paso de dirigir a los asgardianos a Latveria, al igual que me gustaría saber también porqué decide revelarle a Thor dónde encontrar a Sif, cuando sabe que ella es un impulso bastante considerable que sumar a la fortaleza que ya de por sí tiene nuestro Dios del Trueno. Como consecuencia de todo esto, la historia parece acabar en un bien llamado impasse (o impás), en el que no sabremos exactamente qué ocurre con Loki, con Von Muerte, con los asgardianos, con Balder, con los Compañeros, y mucho menos con Thor, al cual veremos en este volumen más humano que nunca. No me ha convencido para nada, y todo esto se debe según he podido comprobar por el ancho y largo reino de internet, a que Straczynski no le gusta derivar sus historias hacia un final incierto. Le anunciaron que Thor tendría que salir, después del tremendo éxito de su serie, en Asedio. Completamente estresado y ofuscado, Straczynski intentó continuar la serie como mejor pudo, hasta que al final dejó el proyecto lo suficientemente concretado como para que otro guionista pudiese continuar la historia hacia esos futuros volúmenes en el que por el momento, no se sabía el destino del Dios del trueno.
Eso si, antes de dejarlo aquí, me gustaría mencionar algunas cosas que no solo me han parecido buenísimas, sino que las considero como verdaderas pequeñas joyas dentro de este cómic. Me refiero a las escenas en las que se muestran imágenes de cómo ven algunas víctimas –por culpa de las manipulaciones de Loki– su realidad, la aparición del Doctor Extraño como experto a la hora de tratar con magia y brujería, el inquebrantable espíritu de Volstagg ante la adversidad, la expresión en el rostro de Balder, en el que se intuye que sabe más de las maquinaciones de Loki de lo que realmente deja entrever y, por supuesto, la forma en la que está narrada la relación de la bella Kelda con William. Todo esto hace que el cómic merezca la pena tenerlo, a parte de la gran calidad de su dibujo, con lo que puedes recrearte todo lo que quieras y más en cada página por el simple placer de ver su trazo y las expresiones en los rostros de los personajes. Es una pena que al guionista le entrase el pánico, la serie se podría haber convertido sin demasiadas dificultades en una de las mejores jamás escritas sobre este personaje tan característico. Por último, no se me olvida comentar que aparte de la fantástica introducción realizada por Celes J. López, hay al final una pequeña historieta de los cómics antiguos de Thor, guionizada por Stan Lee, en la que también aparecerán Los Vengadores. Narrada a la antigua usanza, eso sí, pero realmente curiosa. También tendréis una extensa galería de seiscientas portadas distintas, para el que tenga paciencia y quiera verlas todas con una buena lupa.
3 comentarios
La verdad es que los dos volúmenes anteriores me han gustado bastante, creo que el segundo incluso más que el primero, pero no tendría ni idea de que este tercer volumen fuera desigual en cuanto a calidad de la trama o de los elementos que la conforman. El Spiderman de este autor, por ejemplo, me gustó bastante, creo que hizo un buen trabajo con Spiderman, y con Thor ha hecho lo mismo, al menos con los dos primeros: buena calidad y acompañado por un dibujo excelente.
Empezaré con él a ver qué tal resulta, tengo curiosidad por ver lo que pinta Víctor Von Muerte en la trama, por lo menos es impresionante gráficamente hablando. Pero es cierto eso de que cuando un autor se somete a demasiada presión, su capacidad creativa se ve resentida, y es una lástima porque toda posibilidad se tira por el desagüe, dejando tan sólo a la imaginación lo que podría haber resultado en caso contrario.
De cualquier manera, una buena reseña de lo que podemos encontrar en el volumen. Tengo ganas de leerlo para contrastar opiniones, y no negaré que pensaba que la serie duraría más, se me ha hecho demasiado corta (al contrario que su Spiderman, que fueron cinco volúmenes en la colección "Marvel Héroes").
Pues sí Cyram... después de leerte sólo puedo decir que estoy de acuerdo contigo y que, tras dos volúmenes vibrantes, esperaba la conclusión con muchas ganas y me desinflé un poco.
Cierto que la puesta en escena es espectacular y que tanto Djurdjevic como Coipel le dan a Thor todo el esplendor y fortaleza que debe irradiar un dios asgardiano, pero... el guión cojea.
Una pena que el fin de ciclo sea un tanto descafeinado, pero me quedo con los buenos momentos que me ha hecho pasa Stracynski.
Salud!
Sabéis que normalmente cuando hago una reseña intento tirar hacia "lo bueno" que se puede encontrar en la obra, pensando además en que hablo desde mi punto de vista y en que todo el mundo puede tener su propia opinión, pero en este caso... la cosa estaba muy clara porque el mismo guionista lo explicó en su web personal. No es lo que esperaba para el final de este ciclo precisamente porque el nombre de Straczynski resonaba constantemente en mi cabeza creándome expectativas.
Sin embargo, como bien decís, el ver a Loki desplegando todas sus artes de la manipulación, la representación de Latveria y al mismo Von Muerte... nos ofrecerá muy buenos momentos que al fin y al cabo, no dejan de gustarle a cualquiera al que le gusten los cómics. xD
Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.