Los aficionados al género vampírico encontrarán en los cuatro actos en que se divide Las crónicas de Legión una interesante propuesta que presenta el recurso de la ficción histórica y la importancia que el vampiro han tenido desde la Edad Media, refiriéndose para ello al mito de Drácula desde un punto de vista distinto gracias al guionista Fabien Nury. No es la primera vez que un autor llega para contar la enésima versión del vampiro romántico e hiperpoderoso, pero Nury plantea las cosas de una manera diferente, más enfocada hacia la idiosincrasia y valores del vampiro como criatura solitaria, que como el típico monstruo plagado de clichés que ha visto potenciada su popularidad a lo largo del siglo XX.
Las crónicas de Legión, serie de cuatro álbumes que Yermo Ediciones ha recopilado en un único y grueso volumen en tapa dura, tiene la particularidad de que va alternando entre diferentes épocas, para contarnos una trama que se alarga en el tiempo, y que de alguna u otra manera se relacionan entre sí gracias a los diferentes personajes que la pueblan. Las crónicas de Legión toma como punto de partida el siglo XV (época que sirve de introducción en lugar de ser una periodo central), y pasa por otras etapas de la historia del mundo como son el siglo XVI, la guerra napoleónica en las estepas rusas de principios XIX, hasta mediados y finales del siglo XIX en plena época victoriana. Cada una de dichas épocas está retratada de manera magistral, no sólo por la indumentaria de los personajes, escenarios o elementos propios del lugar, sino que cada uno de los dibujantes que participa en los cuatro álbumes de la serie original francesa han aportado su estilo personal a la hora de retratarla esos periodos. Por ejemplo, tenemos a un Mathieu Lauffray que sienta las bases con su impecable estilo en la Edad Media (artista del que, por cierto, me declaro seguidor incondicional gracias a la serie "Long John Silver"); a un Mario Alberti que se dedica a plasmar con sus pinceladas el salvajismo de la América precolombina (muy bien escogido este autor por su estilo menos limpio que el resto de los artistas involucrados); a Tirso Cons (con el color de Javier Martín) por retratar la aglomeración de elementos propios de la Inglaterra del siglo XIX en cada una de las viñetas, el detalle de cada libro, candelabro o pinta de cerveza; y por último Zhang Xiaoyu, quien con su estilo más colorido pone imagen a la época napoleónica, con especial atención al cromatismo de los uniformes de los soldados, los fuegos de campamento o las oscuras tonalidades de la noche. Por último, Éric Henninot, quien hace una magnífica representación de un tablero de ajedrez, tan brillante en mi opinión, que es una pena que este artista no tenga más protagonismo en el resto de álbumes.
Personalmente, siempre me ha gustado que los autores jueguen o trasteen con la historia alternativa (véase la saga de videojuegos "Assassin's Creed"), colocar personajes o criaturas ficticias que han ayudado a moldear los acontecimientos tal como los conocemos, y Las crónicas de Legión satisface mis expectativas no sólo por el interesante apartado artístico, sino por la naturalidad con la que Fabien Nury va alternando las épocas según sirva a los propósitos de la trama. Es frecuente encontrar que de la América precolombina y la lucha que allí ocurre entre los dos hermanos, saltamos al Madrid del siglo XIV o a la época victoriana, apreciando de paso los avances tecnológicos, sociales y culturales. Pero también destaca los detalles (y los homenajes) con los que el guionista hace partícipes de los acontecimientos a diversas figuras históricas. Lord Byron, por citar uno de los más relevantes, es aquí un vampiro ancestral en busca de sucesor, a quienes Nury dota de ficción pero siendo coherente hasta cierto punto con la historia verídica y motivaciones del personaje (que se vió involucrado en diversas revueltas de Grecia e Italia).
Las crónicas de Legión es un cómic realmente notable y del que se pueden destacar muchas cosas, en especial el sentido por la diversidad pictórica y el tratamiento del vampiro como figura eterna y solitaria, que se involucra en la historia de nuestro mundo de una manera más o menos activa, y que pierde por el camino esa humanidad que en principio les caracteriza con tal de seguir progresando hasta completar sus objetivos; es también una constante alusión a Drácula y un punto de vista diferente del mítico vampiro. Como apunte negativo, quizá podamos argumentar que gracias a esa diversidad artística nos sabe a poco algunas de las épocas retratadas (hubiera querido ver más el Madrid del siglo XIV) y que nos hubiera gustado mucho más deleitarnos en cada una de ellas; pero entonces no estaríamos hablando de una serie cerrada de cuatro álbumes, sino que podría haberse extendido hasta ocho, diez o quizá doce álbumes en total, perdiendo esa intención autoconclusiva y centrada en aspectos concretos de la figura del vampiro a lo largo de unas épocas determinadas. Por lo demás, la edición española quizá pueda parecer que tiene un precio algo elevado tratándose de un volumen integral (aunque ninguno de sus álbumes han sido publicados antes por separado), pero lo compensa la calidad del papel, la reproducción del color y el dibujo.
Vampiros Cómic Historia
Las crónicas de Legión.
(Les chroniques de Légion).
Yermo Ediciones, diciembre de 2013.
232 páginas.
No disponible en ebook.
45 € (tapa dura).
Lectura independiente.
3 comentarios
El precio duele como con cualquier integral, pero creo que será una de mis próximas compras :)
Aunque conocía la obra de verla en los estantes, no le había prestado demasiada atención, y últimamente me apetece tanto temática vampírica como cómic europeo (el otro que tengo en mente es el tomo de "Las landas perdidas")
Diría que es una obra que ha pasado un poco injustamente desapercibida por las librerías, siendo uno de los cómics más notables -en mi opinión- del año pasado. Quizá la cuestión del precio haya tenido que ver en esto, aunque la edición está currada.
Pude observar la muestra que tuvo lugar en el último Expocómic con las láminas de Tirso, y al menos por su parte hay que afirmar que el trabajo es de 10.
Yo compre el cómic en el momento de su salida y lo disfrute mucho . Yo no suelo meter mucho tiempo seguido de lectura pero las Cronicas de Legión fue devorado en una sentada .
Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.