"Lluvia Negra", de Graham Brown

Estamos ante uno de esos thrillers que se han ido poniendo de moda a lo largo de los años, de los que están ambientados en un paraje exótico y tras el que hay un fabuloso misterio. Lluvia Negra nos embarca en una expedición al Amazonas en busca de un secreto milenario y un mal ancestral que acecha en el mismísimo corazón de la selva, descubierto décadas atrás por una expedición que prácticamente fracasó en el intento si no fuera por esos misteriosos cristales…

Bajo esta premisa tenemos una novela de aventuras con un motivo de ciencia-ficción de fondo que agradará sobretodo a los que gusten de este tipo de lecturas con aires de bestseller. Hay un puñado de elementos fantásticos sobrenaturales y el texto está trufado de leyendas con una importante base mitológica, extractos de la civilización Maya, sus dioses, sus leyendas y origen, en apariencia bien documentados por el autor y que dan sentido al desarrollo de la novela. No por nada, uno de los motivos de que haya una expedición durante este siglo veintiuno, es el de comprobar si realmente la cultura Maya se inició en el Amazonas y no donde todo el mundo cree. El NRI, institución del gobierno americano que busca las más relevantes pruebas científicas avanzadas, está tras esta expedición, ya que lo que se oculta en el Amazonas podría revolucionar totalmente la comunidad científica de los próximos años. Pero no es más que una tapadera tras lo que se oculta algo más, como esos monstruos ávidos de sangre que aparecen en el prólogo de la novela y que son una constante a lo largo de ella.

En un principio, este thriller de aventuras y acción parece que es una historia más sobre el inminente (y ¿ficticio?) Apocalipsis que tendrá lugar en 2012, pero la novela se aleja totalmente de este tema. La trama se mueve gracias a una serie de personajes que se involucran en la expedición o forman parte de ella desde el principio. Personajes cliché con unas capacidades determinadas: el profesor universitario, el mercenario retirado que salva al grupo en más de una ocasión, la atractiva y joven prometedora al cargo del viaje… Personajes que hemos visto mil y una vez y que aquí no son diferentes, pero cumplen de sobra con el relato, aunque está cantado desde el principio que van a tener problemas con los monstruos del Amazonas que nadie asocia con cualquier criatura conocida. Por supuesto, no faltan los villanos de turno que complican la vida a los protagonistas y tienen sus propios fines. Novela clásica donde las haya, no sólo por los personajes, sino por los acontecimientos o la manera de desarrollar la trama. Pero ojo, esto no es necesariamente un inconveniente, pues los que busquen una historia de este tipo saldrán ampliamente recompensados. Tiene cierto enganche por los motivos que apuntaba más arriba en cuanto al misterio a desentrañar, aunque personalmente salí ligeramente decepcionado, pero no explicaré los motivos pues sería desvelar la trama final.

La novela en sí destaca por su ambientación del mundo Maya, sus dioses, simbología y leyendas relacionadas, elementos con los que van relacionándose los protagonistas a medida que van internándose cada vez más en la selva amazónica, gracias en parte a los conocimientos aportados por el miembro del grupo que sabe de lo que habla. Por otra parte, tenemos las consabidas ensaladas de tiros y escenas de acción, pues en la novela se ven involucradas bandas de mercenarios, soldados, tribus amazónicas y monstruos surgidos del inframundo, lo justo para que haya enfrentamientos y discrepancias. De todo esto saldría desde luego una buena película de acción “made in Bruckheimer”, y más si tenemos en cuenta que historias de este tipo han visto su versión cinematográfica, ahí mismo están las novelas de Dan Brown.

Lo que ocurre muchas veces con este tipo de novelas es que parece que tanto el estilo de de la narración como los personajes en sí son ligeramente fríos y distantes, como si costara un poco conectar con ellos. Posiblemente se deba al tipo de novela en sí o a que los acontecimientos narrados deben serlo, por las implicaciones que tendrá el cumplimento de la trama o el futuro secreto a descubrir. Pero hasta las relaciones entre los personajes son un tanto frías. Pero en definitiva, si lo que se busca es una novela entretenida, un pasapáginas con aires de bestseller, espionajes y conspiraciones de por medio, es una novela recomendable. Por el contrario, puede que a la mayoría no le sorprenda los giros argumentales y la sorpresa final que todo el mundo andará buscando en este tipo de novelas. No es mala novela, pero podría haber resultado mejor de lo esperado. Aún así, se trata de la primera obra de Graham Brown y quizá la siguiente resulte en más estima. Si las fuentes no engañan, habrá una continuación con los mismos personajes, titulada Black Sun. Eso sí, la trama de Lluvia Negra queda más que resuelta.

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«Y llegó uno llamado El que Arranca los Rostros, que les sacó los ojos. Y llegó uno llamado El Sangrador Súbito, que los abrió en canal y les arrancó las cabezas. Y entonces llegó el torrente: lluvia negra cayendo del cielo cual una resina. Lluvia el día entero, lluvia toda la noche, y a causa de ella la tierra quedó ennegrecida.»

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Colección/Serie: Independiente

Título Original: Black Rain / Editorial: Minotauro. / Formato: Rústica con solapas, 396 pág. / Año: 2009. / Precio: 20,50 euros. / Traducción: Luis Vigil.

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por Loren Sparrow febrero 26, 2010