Título original: A Memory of Light.
Edición: 976 págs. Timun Mas, septiembre 2013.
Disponible en ebook: Sí.
Precio: 32 € (tapa dura) / 9,99 € (electrónico).
Traducción: Mila López.
Temática: Fantasía épica.
Correlación: Entrega final de “La rueda del tiempo”.
Ha llegado. El Tarmon Gai'don, la batalla final en la que se dirimirán todas las disputas existentes entre las fuerzas de la luz y de la oscuridad. Ahora, cuando distintas versiones de las profecías del Ciclo Karaethon nos arrojan diversas posibilidades sobre los tres ta'veren a los que conocimos hace ya veinte años en la antigua región de Manetheren –la modesta Dos Ríos–; tras miles de confrontaciones entre los elegidos y todos los que colaboran para que El Dragón Renacido pueda llegar a las mismas entrañas de Shayol Ghul, la batalla se presenta como algo imposible de superar. Brandon Sanderson, cual ente superior manejando los miles de hilos que pueblan el Entramado de “La rueda del tiempo”, ha logrado darle conclusión a una de las sagas de fantasía que más fieles seguidores ha logrado reunir alrededor de todo el mundo. Como ya dije en las anteriores reseñas sobre los dos libros que llevaban hasta este asombroso final –La tormenta y Torres de medianoche–, Sanderson ha imitado a la perfección el estilo del difunto Robert Jordan para que la serie no perdiese su esencia aderezándola, eso sí, con buena parte de su potente imaginación haciendo que sus pinceladas sean visibles dentro de un entorno tan inmenso como este.
Hemos viajado a regiones tan dispares como Tremalking y el Yermo de Aiel. Hemos conocido lugares tan estrafalarios como Ebou Dar o Tear y también hemos llegado a conocer a personajes tan dispares entre sí como Min Farshaw y Elayne Trakand. Leímos con los ojos como platos como algunos héroes del Cuerno de Valere salían del tiempo y el espacio e interaccionaban con nuestros personajes principales aportando su experiencia y algún que otro recuerdo. Observamos como surgía desde lo más profundo de Shadar Logoth un mal tan instintivo y básico que ni el mismo Oscuro habría previsto crear y también contemplamos las largas reuniones que los Ogier mantenían en sus steddings planeando si participar o no en La Última Batalla. Es complicado hacer la reseña de un libro como este, teniendo en cuenta que va dirigida a un público amplio, no únicamente los que se han leído este libro o van a leerlo, si no también a todos aquellos que han esperado tantos años para saber si finalmente la saga iba a concluir y si lo iba a hacer correctamente. Como ya sabéis, en esta web nos caracterizamos por ofreceros reseñas de calidad sin spoilers, por lo que pienso seguir esa tradición con la dificultad añadida de tener veinte libros que tener en cuenta a la hora de expresaros qué ha significado para mí este final a una saga tan extensa.
Para empezar, me gustaría aclarar que este libro no es como todos los demás. Todos sabíamos lo que iba a pasar, ya que los últimos dos libros, el de La tormenta y Torres de medianoche, forman al fin y al cabo un todo junto a Un recuerdo de Luz, que es el que nos ocupa. Por esta razón no es de extrañar que el último libro haya sido un perfecto ejemplo dentro de la fantasía épica. Una batalla que dura prácticamente mil páginas y que a su paso arrasará todo cuanto hemos conocido y algunos a quienes cogimos cariño. Sí, habéis leído bien, es en este momento cuando yo creo que Sanderson se ha desquitado por la gran cantidad de horas que se ha tenido que pasar reubicando tramas para hacer encajar todas las piezas en su lugar correcto. Ha sacado la guadaña y se ha puesto a cortar los hilos de algunos personajes a los que Jordan lleva arrastrando irremisiblemente hasta el final. Hay quienes mueren de forma épica y hay quienes simplemente mueren de pasada. Para mi gusto... quizás no mueren suficientes personajes, pero claro está, escribir un final como este supone enfrentarte a las iras de miles de fans, a la vez que intentas mantener el equilibrio tan delicado que tiene una saga tan dilatada en el tiempo.
Como conclusión, considero que Brandon Sanderson ha hecho todo lo humanamente posible, pero si os decía en su momento que no he obtenido de esta obra todo lo que me esperaba, es porque sospecho que Robert Jordan dejó ya escrito el final. De esta forma, tenemos un texto con cientos de tramas magistralmente entretejidas, ofreciéndonos lo mejor de esta época repleta de nuevas ofertas en cuanto a literatura fantástica se refiere, pero a la vez con un cierto tono “vintage” que hace que tengamos siempre presente al difunto Jordan. El resultado de todo esto son tres excelentes libros que le estaban poniendo una guinda de oro a la saga, pero que en el último momento, justo cuando todo debía de culminar en una explosión de sensaciones y de miles de recuerdos que se agolparan en nuestra mente, nos encontramos con un final sacado de los años 80-90, en el que los personajes vuelven a su estatus anterior, en el que la acción se desarrolla de una forma un tanto hierática y en el que se olvidan por completo a los otros personajes importantes junto a los que hemos recorrido un largo camino. Para mi gusto esto ha sido algo parecido al final de algunas sagas famosas de fantasía –no diré los nombres de ninguna de ellas para no dar pistas–. Habrá dejado satisfechos a algunos, mientras que a otros nos ha dejado en un estado de stand by, esperando algo que debería haber sucedido, expectantes ante eso que nos ofrezca la sensación que llevábamos buscando desde hace tanto tiempo. Por lo que puedo decir que en este caso, “La rueda del tiempo” ha tenido un desarrollo mucho más interesante que no su final. Una lástima, pero supongo que ha sido un homenaje de Sanderson ante Jordan, o quizás un deseo que se planteó sobre la mesa cuando el escritor avistó su inminente final para que el autor de “Nacidos de la bruma” se encargara de concluir todo tal y como él lo habría querido.
Lo dicho, una saga muy recomendable que formará parte de los grandes clásicos de la literatura fantástica para siempre. Una saga que nos ha ofrecido a muchos de nosotros un viaje inolvidable por miles de ediciones, desde las antiguas con portadas de Ciruelo en tapa dura con sobrecubierta hasta las nuevas en tapa dura de color negro, pasando por bastantes libros divididos en rústica con solapas, códigos de barras en los lomos y cómo no... para los que llevamos tantísimos años completando la colección, dos números 17 que siempre nos harán chirriar los dientes y fruncir el ceño. Al fin y al cabo, una aventura, ya sea esta buena o mala, que siempre nos hará recordar mil anécdotas relacionadas con “La rueda del tiempo” y nuestro viaje hacia el Tarmon Gai'don.
6 comentarios
Solo puedo definir esta reseña de una forma: ¡Envidia infinita! Tengo pendiente el último desde hace tanto tiempo como cualquiera, pero aún no me he animado a hincarle el diente. Tal vez sea porque, como dices, cualquier final, por bueno que sea (y este parece que no lo es tanto), acaba cerrando una etapa mágica, ese viaje que llevas haciendo durante tantos años, y no sé si quiero esa sensación. Por otra admitir que cometí el "error" de comprarme algunos de los libros en una edición de coleccionable bastante regulera que sacaron hace algunos años (era joven y no tenía buen gusto en cuanto a eso), así que tengo los libros salteados mezclando ediciones, siempre tengo la duda de si me merece la pena comprármelos en la edición actual, que son muchos y bastante caros.
Dejando de hablar de mí (ególatra), supongo que es como comentas, la mano de Jordan vuelve de más allá de la tumba, para recuperar lo que es suyo después de que los que conocemos a Sanderson nos esperábamos algo más "en su onda". Y eso que yo a Sanderson le tengo ojeriza porque no me suelen gustar sus finales.
Es un libro que tarde o temprano acabaré leyendo, eso seguro, y esta es la primera reseña que leo. Me fío bastante de vuestro criterio, así que iré ya prevenido de lo que voy a encontrar. Gracias por la reseña, tienes razón en que es un libro muy difícil de reseñar, por todo lo que implica y lo que lleva detrás.
Es cierto que da mucha pereza y algo de impresión, lanzarse a terminar una saga que llevas completando durante tantísimo tiempo, pero supongo que como todo en la vida... es algo que pasa, una etapa más. Quizás sea una forma de progresar como lector. Así que bueno... mil gracias por pasarte a leer la reseña, ya sabes que es un gusto ver cómo la gente comenta algo que has escrito con gran esfuerzo, ya sea este comentario bueno o malo xDD, por lo que ánimo que quizás a ti el final quizás no te deje tan frío como a mí. Todo es cuestión de experimentar las cosas.
Cuando lo hagas no te olvides de comentarnoslo *.*
Yo soy un privilegiado, ¡no tengo dos números 17! Dejé la saga justo en el quince de la edición "marrón" de Timun (¡ugh!), así que cuando la nueva edición me alcanzó, me bastó con engranar por el 16. Anda que no tuve suerte ni ná xD.
Por lo demás, estupenda reseña. Yo tardaré mucho en leer el libro, pero las buenas críticas hacia el trabajo de Sanderson me harán embarcarme de nuevo en la Rueda algún día.
Una vez mas, me complace leer la reseña publicada. Ya avisado, buscare el libro con interés, pero sin premura, he perdido el hilo de la saga, mucho tiempo desde que leí el ultimo libro y memoria pobre. Tendré que releer los dos últimos tomos para retomar el hilo de la saga.
Yo lei el libro e incluso derrame alguna lagrimilla por haber terminado la saga. Si es cierto que este libro se debe leer como un todo junto a La Tormenta y las Torres de Medianoche, pues originalmente eran uno, o eso queria el gran Robert. No se debe juzgar el final solamente, el libro es sublime de principio a fin, no deja nada fuera de lugar. Habra cosas que gusten a todos y otras que no (ami dos por ejemplo) pero desde el final de la Tormenta todo empieza a llegar a su increible y soprendente final. El libro compuesto por Brandon ha sido un tributo enorme al, nuevamente, gran Robert Jordan, puede estar satisfecho donde quiera que este
Hola! Yo llevo siguiendo la saga desde que se empezaron a publicar los lbros alla por el 93 y aunque estoy bastante de acuerdo con algunas cosas que cuentas... creo que sanderson en todos los libros hace un autentica escabechina.. y este en particular es un horror dificilmente perdonable. No voy a poner spoilers por no fastidiar el contenido del libro, pero mueve a verguenza que algunas de las tramas a las que ha dedicado cientos de paginas se cierren en la mitad de un capitulo, que los renegados no tengan en absoluto un papel acorde a su importancia en la historia.
Es de chiste que con el fin del mundo encima, se siga insistiendo en el caracter de las aes sedai o en las costumbres de otros pueblos, surrealista la forma de cuadrar las profecias de min etctectetc. Un final que seria aceptable si acaso para una saga de 3-4 libros estilo crepusculo, pero despues de bombardearnos con 20 libros contandonos todo tipo de datos esto solo puede definirse como timo manifiesto
Yo deje de comprar los libros, hacia el 14 pq ya me estaban aburriendo y los he ido siguiendo por biblioteca o pq me los dejaban, pero en mi opinion desde la salida de Rhuidean la serie se vuelve totalmente anodina
Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.