Lo primero que me llamó la atención de Tempus, la nueva novela de Nerea Riesco dentro del sello M de Minotauro, fue la portada. Sí, puede sonar terriblemente frívolo, pero ese evocador paisaje de Londres fue todo un flechazo. Lo segundo fue saber quién era la autora. Ya conocía su forma de escribir y me quedé enamorada de su forma de narrar en El elefante de marfil, una novela histórica que, a lo largo de tres generaciones, contaba una eterna partida de ajedrez entre musulmanes y cristianos en torno a la posesión de la Giralda de Sevilla. Así que si sumamos esto a que Tempus es una novela que habla de un misterio científico, un misterio histórico y un misterio cruento y oscuro, blanco y en botella. Este libro tenía que ser mío. My preciouss!
¿De qué va Tempus? Es difícil contar algo del libro sin desvelar nada, sin caer en el pantanoso terreno del spoiler, sin chafaros muchas de las grandes sorpresas que esconde esta novela y que será lo que os tenga pegados a sus páginas. Me ceñiré a la breve sinopsis editorial, la punta del iceberg de lo que realmente esconde la novela, y os animo a descubrir todo lo que se esconde entre sus páginas por vuestra cuenta y riesgo. La historia de Tempus comienza con el brutal asesinato del doctor Leonard Green, un erudito de Cambridge que estudia teorías de física cuántica relacionadas con el espacio y el tiempo, y que ha encontrado una fórmula que puede revolucionar la física moderna. Su única hija, Daniela, una jovencita solitaria y triste, está ahora en peligro y en el punto de mira de un grupo de individuos que ven peligrar su “status quo” si dichas investigaciones salieran a la luz. La única persona que parece tener la llave a todos los enigmas es uno de los alumnos aventajados del doctor Green, Richard Chanfray, y por lo que parece también es la única persona que puede salvar a Daniela de ese misterioso grupo dispuesto a todo por mantener su modo de vida. ¿Interesante, verdad?
El punto fuerte de la novela, sin duda, es esa mezcla entre misterio histórico, literario y científico que nos tendrá pegados literalmente a sus páginas y del que poco más puedo decir. Tempus también tiene una cuidada ambientación, una exhaustiva documentación y unos protagonistas atractivos, Daniela y Richard, que son quienes llevan el peso de la narración. Ambos son creíbles, sólidos, muy bien perfilados y dan verosimilitud a una trama que en ocasiones podría pecar de rocambolesca y que ellos se encargan de atar en firme al suelo. Los personajes secundarios son otras de las grandes, pero grandes, sorpresas de la novela y justo por eso, tampoco puedo adelantaros nada más. En serio, me siento como si toda la novela estuviese sometida a “secreto de sumario” y tuviese que medir con cuenta gotas mis palabras. ¿Qué otra cosa podría deciros salvo «leedla»?
Otra virtud de Tempus es que se trata de un libro único. ¿Libro único? Sí, increíble pero cierto. En un mercado saturado por este tipo de publicaciones, muchas veces innecesarias y que solo tienen en mente poner a prueba la paciencia del lector y de paso su bolsillo, ser consciente que cuando abras el libro tendrás también el final es absolutamente refrescante y motivador. Nada de eternas esperas, libros de relleno, series interminables y bajones de calidad… Por no mencionar el riesgo de que sea cancelada y te quedes con tres palmos de narices. Así que si todo lo anterior no os ha convencido, quizá lo haga el saber que tendréis entre manos una historia autoconclusiva.
Solo he encontrado una pequeña pega a la novela y es su espíritu de “clase magistral”. La novela está fantástica y maravillosamente documentada, pero hay eventos, hechos, fenómenos científicos que muchas veces, más que ser nombrados o ser explicados someramente, son mostrados como verdaderas clases magistrales llenando páginas y páginas de explicaciones, fechas y datos que sinceramente poco aportan a la narración, en ocasiones cortando diálogos o haciendo que el buen ritmo interno de la novela decaiga bastante. Creo, y es una humilde opinión personal, que una nota a pie de página o en los apéndices hubiese sido más efectiva que hecho de que el personaje se transforme en catedrático de universidad y nos suelte una parrafada de varias páginas sobre, pongamos un ejemplo, la teoría de la relatividad. Todos tenemos una idea general de cómo es y quién es el padre de la teoría de la relatividad, y todos podemos entender más o menos su uso en el contexto de la novela. Es decir, poco aporta a la trama general el saber la ecuación, las condiciones de uso, los parámetros, el valor de la constante, el origen, la fecha y las anécdotas de su descubrimiento. Pero vamos, esto es más una cuestión de gusto personal y es totalmente subjetivo.
En definitiva, Tempus es una refrescante e interesantísima novela que aúna misterios literarios, históricos y científicos, y de la que no podréis despegar las manos. El nuevo sello M de Minotauro está resultando ser toda una caja de sorpresas, apostando por autores nacionales y con una calidad incuestionable. ¿Os atrevéis a uniros a Daniela y Richard? Animaos, que no podréis despegar las manos de sus páginas.
El libro en fotos
Tapa dura con sobrecubierta, 492 págs, 20,90 €. Disponible en ebook
Escrito originalmente en español.
Lectura independiente.
comentarios
Jolines, si te soy sincera la reseña que has hecho me ha dejado con la intriga. Me gustaría leerme el libro dentro de poco, ciertamente parece interesante y entretenido. A ver si cae. ^^
Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.