31 de octubre de 2014

Especial Halloween: 9 imprescindibles para pasarlo de miedo

Hay algunas calabazas y bastante terror. ¿Truco o trato?


Es Halloween, pasada la medianoche la brujas y los espíritus campan a sus anchas por el cielo y posiblemente llamen a la puerta de casa pidiendo caramelos y golosinas. Pero no solo hay que pensar en los disfraces, la bebida y la comida, también tiene que haber tiempo para la lectura, las películas o los juegos, y es por eso que tengo en el bolsillo una lista de recomendaciones perfectas para estos momentos, y lo bueno es que se podrá echar mano de ellas dentro de unos días, una semana, un mes e incluso el año que viene.

En lugar de recomendar la típica lista de novedades, pensada para atraer a un público que está pendiente de las modas y de lo último que ha salido al mercado, me he permitido el lujo de recurrir a obras ya publicadas más allá de los últimos meses, y espero de verdad que os satisfagan tanto como a mi.

LITERATURA


El libro del cementerio – Neil Gaiman

La primera de las recomendaciones parece muy evidente, pero nunca me cansaré de insinuar –o decir directamente a la cara– a cualquiera que le guste la literatura, que lea El libro del cementerio. Es en mi opinión lectora una de las novelas más redondas que ha salido de la pluma de Neil Gaiman, y tiene montones de poderosas escenas que pasado un tiempo regresarán a la mente del que las lea y será muy difícil olvidarse de ellas. Sentimientos en estado puro, y como la temática se centra en cementerios, espíritus y la convivencia entre humanos y fantasmas, la convierten en la novela ideal para leer durante estas fechas.

De paso aprovecho para comunicar que uno de los capítulos de esta novela está recogido en la antología El cementerio sin lápidas y otras historias negras: puede leerse de manera independiente sin problema –aunque ni mucho menos se disfruta igual–, pero mi recomendación es que se lea directamente El libro del cementerio, y dejarse de zarandajas. ¿Has leído Coraline? ¿El océano al final del camino? El libro del cementerio es obligatorio si te gustan ambas o una sola.

Las palomas del infierno – Robert E. Howard


Esto ya son palabras mayores, no es una novela dirigida a todos los públicos –young adult, se podría decir– como El libro del cementerio, sino un relato de terror puro y duro para adultos. Estamos ante uno de los relatos más terroríficos que ha dado la literatura pulp y con el que más nos ha estremecido Robert E. Howard en toda su bibliografía –en mi ranking personal «La piedra negra» vendría después–. Escrita a finales de 1934 y publicada por en la revista Weird Tales en 1938, nos cuenta las vivencias de dos viajeros que hacen noche en la casona de una plantación abandonada, pero como todos imaginaréis, la casa alberga más secretos de los que aparenta. Un relato perturbador, sumamente atmosférico y que requiere buenas dosis de silencio y concentración para no perderse ninguna de las imágenes que consigue provocar Howard en el lector. «Las palomas del infierno» se encuentra publicado en la antología Los gusanos de la tierra y otros relatos de horror sobrenatural (todavía se puede encontrar rebuscando bien, pero Valdemar la reeditará en breve).

Híbridos y engendros – George R. R. Martin


La segunda de las antologías de cuentos de George R. R. Martin –publicada por Ediciones Gigamesh en nuestro país– tiene mucho de terrorífico y de «hallowinesco». La portada ya nos advierte de que lo que vamos a encontrar en su interior no será especialmente agradable. Relatos como «El hombre de la casa de carne», «Recuerdos de Melody»  o «Los reyes de la arena» –casualmente, los tres que abren la antología– son historias que uno debe leer si le gusta esa semilla que los buenos autores plantan en el interior de todos nosotros, la de lo incómodo y el «mal rollo» que produce estar ante una historia de tintes sin duda macabros –«El hombre de la casa de la carne», por ejemplo, tiene como eje central cadáveres animados que sirven como objeto sexual–, o bien si quiere conocer la otra faceta del autor de los libros en que se basa la serie de HBO Juego de tronos, pero dejando de lado la fantasía en pos de lo sobrenatural.

Los cuentos de William Hope Hodgson


El autor que todo seguidor del género de terror debería leer. No puedes decir que te gusta el género y no haber probado por lo menos un tercio de los cuentos que escribió este autor británico nacido en el siglo XIX –antaño marinero, fallecido por una granada alemana en la Primera Guerra Mundial–. Su producción literaria no es tan extensa como la de otros autores de fechas cercanas o pasadas, pero sin duda su legado merece ser degustado con una buena atmósfera que favorezca la inmersión en escenarios marítimos, en mi opinión donde más ha destacado el autor. Si lo que uno busca es terror relacionado con el mar que no siga buscando si antes no ha hecho una parada por la bibliografía de este señor: conseguirá poner los pelos como escarpias al más pintado. Sus escritos se encuentran repartidos por libros como Los piratas fantasmas –novela– y antologías como La nave abandonada y otros relatos de horror en el mar, así como Un horror tropical y otros relatos (todos ellos publicados por Valdemar), aunque si se quiere un «todo Hodgson» sin duda hay que lanzarse a por Los mares grises sueñan con mi muerte, que precisamente se ha reeditado este mes en Valdemar.

Una sonrisa roja como la sangre – Adam Gidwitz


Este libro de cuentos de Adam Gidwitz –editado por La Galera– resulta perfecto para leerlo en estas fechas, no solo por la vertiente macabra de los mismos que ha querido mostrarnos el autor –sí, esas versiones de los hermanos Grimm que ya no es estilan hoy en día gracias al filtro de la poderosa industria del entretenimiento– sino porque está escrito de una manera sumamente divertida que a los jóvenes encantará y a los adultos divertirá sin igual. Por si fuera poco tiene todo un aire tan irónico, y se lee de una manera tan amena, con el autor dirigiéndose directamente al lector, que será difícil leer una única página más antes de dejar el libro sobre la mesa, solo por ver qué nuevas desgracias les ocurre a los hermanos protagonistas.


JUEGOS

Fantasmas asesinos, librojuego poco convencional


Esta es la recomendación excepcional, la rara, la poco común: un librojuego que no se juega como los que todos conocemos, los de leer, tirar dados y recorrer secciones. No, aquí el objetivo del juego es pasarlo mal –oh, espera, como en Fighting Fantasy–, pero con dos jugadores. Lo ha editado conBarba, se vende en una pequeña caja de cartón –indivisiblemente con un juego de rol de piratas llamado Envenenados, jugadlo también si podéis– y la mecánica es muy sencilla: en primer lugar, cada jugador decide si desempeña el papel de director de juego o de jugador, y dependiendo de eso cada uno coge el libreto apropiado que le corresponda –vienen dos en la caja, y aparte hace falta una baraja de cartas francesa–. El objetivo es hacérselo pasar mal al otro bajo la premisa de que un explorador urbano decide echar un vistazo a los subterráneos de una fábrica abandonada –ubicada en un lugar y espacio temporal indeterminados, pero yo doy a entender que algo malo ha ocurrido en el planeta–. Y ahora viene la gracia del juego: el que hace de director de juego debe inventarse la historia sobre la marcha, improvisadamente y creando una atmósfera de terror que sólo a él le corresponde mantener –con la colaboración del jugador, claro–. No es un juego de risas, sino de crear la máxima sensación de miedo posible, y creedme que pueden salir cosas muy interesantes de este pequeño juego que tiene muchísimas posibilidades –ya me gustaría que su autor escribiese cosas parecidas en otros entornos–. Si te gustan los librojuegos, el terror, o simplemente los juegos creativos de comunicar de tú a tú, este es tu juego. No os arrepentiréis


CINE

Sleepy Hollow – Tim Burton


En una tanda de recomendaciones como esta no podía faltar El libro del cementerio de Neil Gaiman, pero tampoco puedo dejar de recomendar la que me parece la mejor película dirigida por Tim Burton, y que no es otra que la inspirada en el relato de Washington Irving. Sleepy Hollow, Pesadilla antes de navidad y La novia cadáver forman el triunvirato de las películas que hay que ver en Halloween, y Sleepy Hollow contiene todos los elementos que me gustan en una película de estas características: fantasía, brujería, un poco de terror y un alma que no descansa y que por eso asesina sin piedad –de todas formas, las víctimas se lo merecían–. Los efectos especiales son espectaculares y la atmósfera es realmente sobrecogedora, ¿para qué pedir más? Sí, que Tim Burton vuelva algún día a hacer películas como esta –Sweeney Todd puede ser esa peli que buscamos, pero queremos más–.


VIDEOJUEGOS

Anna: Extended Edition


Pocos juegos de terror me han hecho removerme en la silla del PC (ni Dead Space ni Alan Wake, aunque Singularity, BioShock y Metro 2033 sí me han hecho saltar más de una vez), pero sí que hay uno que ha hecho que no quiera seguir jugando, y ese es la edición extendida de Anna. Seguramente será porque el juego de Dreampainters no tiene tantos artificios y explosiones como los juegos de las grandes desarrolladoras, y porque comienzas explorando una casa abandonada en el campo –mi mente dice que lo está– sin ningún tipo de introducción y sin saber donde te encuentras; o a lo mejor es porque de vez en cuando encuentras elementos del escenario que antes no estaban ahí, o que no dejas de escuchar ruidos raros tras una puerta que por narices debes intentar abrir para proseguir con la aventura. Sea lo que sea, no quiero saberlo, Anna: Extended Edition es uno de los juegos de la industria del videojuego que más miedo llega a dar, y no hay más que hablar. Si no sientes nada jugándolo –en las condiciones adecuadas, como siempre–, a lo mejor es que tienes un serio problema alojado en esa parte del cerebro que administra las emociones.


CÓMIC

Hellboy: El hombre retorcido


Esta miniserie de tres números escrita por Mike Mignola y dibujada por Richard Corben es una de las más conseguidas, a nivel de atmósfera de terror, de cuantas se han publicado del demonio rojo. No soy especialmente propenso al cómic de terror, pero de vez en cuando sí me gusta experimentar con otras formas narrativas afines, y cuando en su momento me topé con este relato todavía le daba vueltas en la cabeza a los efectivos puntos de vista utilizados para cada viñeta –creando una muy lograda sensación de espacio reducido– y, como no, a la América profunda que impregna las páginas de El hombre retorcido: locos, paletos y brujas de pueblo son la fauna con la que el demonio rojo de AIDP tiene que tratar en esta historia, incluso con una entidad superior que no estaba prevista. El dibujo grotesco de Corben es un indispensable en su trayectoria, y en El hombre retorcido es indispensable el apartado artístico, por no decir los efectos narrativos de Mignola, que también es un maestro a la hora de crear un buen ambiente de terror.

El hombre retorcido puede encontrarse en tres formatos diferentes: en edición individual en rústica, recopilado en tapa dura en El hombre retorcido y otras historias, o en el segundo volumen integral de Hellboy.

10 comentarios:

  1. Tengo el relato de "Las palomas del infierno" de Robert E. Howard, si mal no recuerdo en dos antologías (una en tapa dura de Valdemar gótica, y el otro un libro pequeño en rústica).
    Los terminé sólo hace unos meses atrás, en este año.
    Y... aunque he leído en otras ocasiones lo mismo sobre ese relato (que es buenísimo, muy aterrador, etc.), personalmete no me causó ningún efecto...


    [SPOILERS]

    No lo recuerdo con exactitud, pero creo que encontraban al final un cadáver en la casa, y al final era uno de ellos que se había vuelto "loco" y se liaba a dar hachazos...
    Me recordó un poco a la típica película norteamericana del "asesino raro en la casa alejada de todo" (si bien, ya digo que no recuerdo con exactitud el relato y los detalles, pues hace meses que lo leí y me pasó muy desapercibido...).

    [Fin SPOILERS]

    No fue aburrido ni pesado (no recuerdo ningún relato del grande R.E.H. que me fuese pesado), pero tampoco me pareció el "nova más".... Y me desconcierta, porque en varias ocasiones ya he leído críticas que lo catalogan de forma maravillosa; y no logro entenderlo (hasta busqué a ver si alguien hacía un análisis completo y lo desglosaba poco a poco, exponiendo los motivos de tal brillantez de la obra; pero no encontré nada)

    No sé, igual sea yo... que nunca me han causado terror ni miedo las películas ni mucho menos las letras...
    Lo único que recuerdo me causase miedo en mi vida fue la "película amateur" de "La Abducción de la familia McPherson", que aunque la vi subtitulada al español (y con una calidad nada buena) me tuvo toda aquella noche sin dormir y encendiendo la luz de la mesilla a cada ruido de la noche...

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  2. P.D.: :o japuta la niña de la familia McPherson.... aún causa pesadillas XD

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  3. Hombre, si no te causa ningún tipo de terror ni las películas de ese género ni relatos como "Las palomas del infierno", entonces puede que el género no sea para ti. XD Los géneros tienen cualidades identificativas, y si estas fallan a la hora de transmitir lo que pretenden a un lector concreto pueden darse dos situaciones: que el lector no esté en el entorno adecuado para percibir el mensaje (que podría ser, como leer un relato así en el autobús, en una zona con mucho ruido, etc), o bien que el receptor no pueda nunca "sincronizar" con la obra por las causas que sean (no consigue meterse en situación, los elementos no son de su agrado, etc).

    Parece muy obvio, pero yo siempre digo que para leer terror hacen falta unas buenas condiciones, es lo mismo que ver una película: no es lo mismo escucharla en silencio, captando cada detalle, que con una jauría de niños correteando al lado.

    En el caso de "Las palomas del infierno" ten en cuenta que el relato es de 1936, cuando todavía no estaba popularizado ese tipo de argumentos (aunque bajo mi perspectiva, hay más que lo que comentas en el spoiler).

    Pero no tienes que recurrir a análisis concienzudos del relato, ni desgloses ni nada, porque aunque leas mil y artículos u opiniones alabando una obra concreta, será muy difícil que vuelvas a simpatizar con ella, y el terror tiene la mala suerte de que si a la primera no te entra seguramente ya nunca volverá a sorprenderte. Es decir, que me parece que nunca podrás sentir esa angustia que causa "Las palomas del infierno" si a la primera no lo ha hecho ya.

    Son emociones directas y prácticamente nunca admiten una segunda oportunidad especialmente si ya conoces el argumento, o yo lo veo así.

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  4. No no, oye, si la historia meterte te mete. Me encanta Robert E. Howard, es de mis favoritos y el que más he leído últimamente. Yo diría que por esa "neutralidad" en su estilo, que hace que no me sea algo súper espectacular, pero a la vez tampoco aburrido ni malo; sino muy correcto.
    Y descuida, si cuando leo lo hago en la noche, en mi cama a la luz de la mesilla (si además está lloviendo, mejor, más ambiente XD )

    Sí, en eso tienes razón. Tal vez sea que estoy demasiado "viciado" por toda la repetición consumista de películas y subproductos que nos han lanzado hoy día, y por eso no puedo apreciar en su calidad el relato. Si lo hubiese leído más joven, sin haber visto tanta tele-pudrecerebros, seguro que hubiese sido distinto...

    Es como todas esas películas, o capítulos de series, que se basan en alguna obra de Shakespear o pretenden "hacerle un guiño". Luego comprendes que es una clásica obra del inglés, pero al ir a leerla ya estás tan viciado que no la saboreas del todo.

    Pero es cierto que el género de terror nunca me ha "asustado"... al contrario, veo el terror como otra forma de "fantasía", por lo que ante una criatura extraña, etc, lo que pienso es "¡adelante, jostias! :P Que quiero ver al monstruo y ver qué tal es... y a ver si el prota lo combate en una batalla encarnizada 3: " (como en su relato "La cosa con pezuñas", que me gustó más)
    Claro que, luego si en la vida real me encontrase con un bicho a lo "Diablo de Jersey", yo sería el primero en salir por patas. Por Crom, siempre podré decir mi excusa: "si hubiera tenido una buena espada..." 8)

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  5. Yo debo reconocer que todavía debo tomar contacto con algunas de las cosas que han salido en este especial. Del que sí que puedo hablar es del juego de Anna.... madre mía que acojone. Lo peor de ese juego no es ya que cambien cosas de sitio en la casa sin previo aviso en cuanto miras hacia atrás, que aparezcan dos caras de niños en una pared donde antes no había nada, o que te gires y aparezca la puerta donde antes se escuchaba a una mujer llorando y que estaba atrancada, abierta de par en par... estando tu solo en esa choza. Lo peor es que tiene una musiquita super alegre que no pega nada con el entorno y que creo que acojona más que la misma casa cuando se corta en algunas ocasiones.... que repelús....

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  6. Cyram, tú debiste "disfrutar" con Paranormal Activity, ¿eh? XD

    Yo, de los 3 tipos de terror, sólo me causa miedo uno (y es el menos explotado).
    - Terror sin a penas mostrar nada: Es muy psicológico, juega mucho con las sombras, los reflejos, etc... Utiliza indispensablemente el factor sorpresa (el "me giro y hay algo", el "abro una puerta y algo me jala hacia dentro", etc).
    Entrarían películas como "Pulse", "Paranormal Activity" o "Mamá" (salvo la parte final de esta).

    - Terror a cara descubierta': Muestra el elemento terrorífico casi en plenitud. Suele basarse más en lo grotesco, lo "feo" y desagradable, que en lo psicológico.
    Entrarían películas de monstruos como el remake de "La Cosa".

    - Terror con una base sacada de la realidad: Este es un compendio de los otros anteriores, pudiendo valerse de la psicología así como de lo grotesco, pero siempre con una cierta base de la realidad física.
    Entrarían las películas del típico asesino americano loco ("La Matanza de Texas"), o de posesiones, casas encantadas ("Poltergeist"), abducciones ("La Cuarta Fase").

    Este último tipo son las únicas que me han llegado a acojonar en algún momento (tal vez por acercarse un poco más a la realidad). El problema es que la mayoría no logran causarme miedo porque, si bien emplean elementos de los otros 2 tipos, comúnmente los mezclan mal o abusan de alguno, etc...
    P.e. "La Matanza de Texas" (y similares), abusa de lo grotesco y lo gore más que del terror... Acaba siendo más una peli de acción "asquerosa", que de miedo.
    "Casi humanos" (la vi recientemente), también abusa de lo "grotesco", y emplea mal el terror psicológico (que un transeúnte se de la vuelta y detrás de él esté 'el malo' mirándole con cara de loco, a plena luz del día en mitad de la carretera... pues no es muy sorpresivo que digamos).

    Pero algunas como "La Cuarta Fase", tuvieron puntos muy, muy buenos.
    Y he visto el trailer de "Alien Abduction", y parece prometer.... pero habrá que esperar a verla.

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  7. El primero que comentas es el terror que más funciona conmigo. No me gustan nada las películas "de terror" donde hay demasiado escándalo: sonidos altísimos, giros de cámara imprevistos, gritos, etc. Más que causarme sensación de terror me enfadan.

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  8. Yo ya te digo, si "salen monstruos" lo veo más como género fantástico "oscuro", que causarme miedo....
    Y es que, de pequeño, me encantaban las pelis de los Critters XD

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  9. De hecho Aedriano, no me he visto las películas aún. xD A ver si me pongo en faena y las busco por el Yomvi, pero vamos... ya te digo que dejé de verme American Horror History precisamente porque me estresaba... y eso que es bastante light. xDD

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  10. Al menos no tuviste que tragarte True Blood, porque te la recomendaron como una "buena serie de vampiros" y con la premisa de "para nada es un 'Crepúsculo'".... para acabar descubriendo que es la versión porno (y absurda) de esos libros útiles sólo para aguantar la pata coja del sofá.

    Yo que esperaba miedo y fantasía, y me encontré con tetas y tías.... Lo llego a saber y me trago "50 Sombras..." XD XD XD XD

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